El vagón cerró las puertas
La música se apoderó de todos
El djembe comezó a subir
miré por el cristal, abrí los ojos
las pupilas se dilataban
y mi reflejo comenzó a bailar.
la niña de al lado me cogió de las manos
delicada, pero apasionada para mover mi cuerpo
el negro sentado en el suelo tocaba teclado
la gente con las manos arriba
apretada, sintiendo el calor del "savor".
Me besó, latina tenía que ser
la camisa se abrió o tal vez yo la abrí
- Próxima estación: Santana.
Aquí yo me bajo, con la música en el cuerpo
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